11.01.2012

Mediciones con perspectiva de género


SOCIEDAD › UNA MESA DE ESPECIALISTAS PARA ANALIZAR LA IMPORTANCIA DE ESTADISTICAS SOBRE LA MUJER

Mediciones con perspectiva de género

El Indec presentó el informe final del Censo 2010 en el marco de una jornada en la que especialistas del país e internacionales analizaron los datos. Uno de los paneles debatió sobre los cambios profundos en la sociedad en materia de género.
Los resultados del Censo Nacional 2010 permitieron analizar profundas modificaciones socioculturales respecto de las perspectivas de género. Durante las jornadas “La población en Argentina y en el mundo: análisis y prospectiva”, organizadas por el Indec, los panelistas de la mesa dedicada a los cambios en cuestiones de género mostraron coincidencia en cuanto a que los datos estadísticos obtenidos permiten determinar cambios en la perspectiva desde la que la sociedad ve las cuestiones de género. La mesa estuvo integrada por Natalia Lurbiner, directora nacional de Asistencia Técnica del Consejo Nacional de las Mujeres; Sergio Caletti, decano de Ciencias Sociales UBA; y José Mejía Guerra, vicepresidente de Información Sociodemográfica, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México.
Caletti abrió el panel ante unos 300 asistentes a las jornadas, que se realizaron en el Hotel Sheraton de Pilar. Ante una presencia mayoritaria de representantes de universidades, investigadores del Conicet y funcionarios del Indec, Caletti destacó el aporte de las universidades en la recolección e interpretación de las estadísticas. “Los datos censales permiten trazar un mapa demográfico, pero también analizar los cambios políticos y culturales, porque las modificaciones demográficas permiten un cambio de paisaje. Un cambio de mirada respecto de cuestiones de género, por ejemplo, que hablan de cambios de perspectivas muy profundos”, señaló Caletti.
Como ejemplo citó un trabajo del Centro de Estudios de Opinión Pública, de Ciencias Sociales, a cargo de Carlos De Angelis, que encuestó a 2200 personas de 22 zonas urbanas y que “reveló tendencias a favor de los avances en el camino de los derechos igualitarios”. Caletti indicó que se consultó a los encuestados sobre su opinión positiva o negativa en relación a cinco ítems: madres que trabajan, parejas que conviven, familias ensambladas, parejas del mismo sexo y parejas del mismo sexo que quieren adoptar. “La primera era la más obvia en su resultado mayoritario –dijo Caletti–. El 80 por ciento estaba a favor de las madres que trabajan. Junto con las dos siguientes fueron los ítems que recibieron las consideraciones más positivas, y hay que decir que fueron resultados esperados. Lo que sorprendió fue el resultado en las dos últimas. El 40 por ciento de los encuestados apoyó que haya parejas igualitarias y el 34 por ciento estuvo a favor de que parejas del mismo sexo adopten niños.”
El segundo expositor, José Mejía Guerra, coincidió con Caletti que “lo que cambió son los roles y la óptica”. Durante su exposición subrayó la importancia de las mediciones para constatar lo que parece obvio pero que no está cuantificado. “Las mediciones con perspectiva de género –dijo– son las que nos permiten observar los cambios, que ahora notamos, gracias a que los medimos.”
Mostró datos regionales y un estudio realizado en México que mensuró el trabajo no remunerado de las mujeres en sus casas. El estudio comparó las horas de trabajo y las equiparó según el valor de la hora en trabajos externos; también determinó la participación de la mujer en el Producto Bruto tomando como guía el trabajo en el hogar y demostraron que las mujeres participaban en las tres cuartas partes de la producción en valor y en horas de trabajo. “Esto nos permite afirmar lo que ya se sabía pero que sólo era un dicho.” Comparó además que el 22,6 por ciento de participación de la mujer mediante trabajo en el hogar resultó mayor que el 17,6 por ciento de participación de la industria manufacturera, que en México es decir mucho. “Hay que poner el esfuerzo en las mediciones con perspectiva de género”, dijo Mejía Guerra para cerrar su participación.
Lo siguió Natalia Lurbiner, que reseñó los avances de género puestos de manifiesto en las cifras del Indec. Consideró que “estamos hablando de nuevos roles, tanto de la mujer como del varón. Lo vemos en cuatro cuestiones centrales: que los roles entraron en crisis; que surgen nuevos modelos de familia y que hay una nueva concepción sobre paternidad y maternidad; y el rol de los medios. Tenemos por un lado la cosificación de la mujer, la violencia de género y los grandes medios, que ubican a la mujer como una víctima pasiva de esa violencia. Nos marca la importancia de que se aplique la ley de medios, donde aparece la cuestión de género, para poner límite a la difusión de un discurso que muestra a la mujer cosificada”.